El 19 de julio, el mundo experimentó un apagón informático sin precedentes que afectó múltiples sectores vitales como la aviación, las emisiones de radio y televisión, las operaciones de supermercados y entidades bancarias. Este evento catastrófico dejó un rastro de caos y confusión a nivel mundial.
Causa del apagón
El origen de este incidente se atribuye a una actualización defectuosa de un programa de antivirus desarrollado por la empresa de ciberseguridad Crowdstrike. Según el director ejecutivo de la entidad, George Kurz, el defecto fue rápidamente identificado y se implementó un arreglo para solucionar el problema. A pesar de la pronta respuesta, el impacto ya había sido significativo.
Impacto global
Aviación
En Australia, la cadena satelital Sky quedó fuera del aire, y en Sídney, todos los vuelos fueron detenidos. En Japón, el aeropuerto de Narita, cerca de Tokio, informó que aerolíneas como JetStar, Jeju Air, Qantas, HK Express y Spring Japan enfrentaron problemas graves con sus sistemas informáticos.
En Europa, aeropuertos como Barajas en Madrid vieron largas filas de pasajeros debido a numerosos vuelos retrasados. En Estados Unidos, las principales aerolíneas, incluidas United, Delta y American Airlines, emitieron un «alto en tierra global» para todos sus vuelos, paralizando el tráfico aéreo en uno de los días más concurridos del año.
Otros sectores afectados
Además de la aviación, las emisiones de radio y televisión se interrumpieron, y los supermercados y entidades bancarias se vieron gravemente afectados. La aparición del mensaje «error fatal» en las pantallas de computadoras fue una constante en todos estos sectores, dificultando la operación normal y causando pánico entre los usuarios.
Respuesta y solución
Microsoft aseguró que la «causa subyacente» de la falla ha sido corregida para sus aplicaciones. Sin embargo, la magnitud del daño causado por el apagón ha suscitado dudas sobre la seguridad y la fiabilidad de los sistemas informáticos globales.
George Kurz de Crowdstrike expresó su compromiso con la seguridad cibernética y aseguró que se están tomando medidas adicionales para evitar que un incidente de esta naturaleza vuelva a ocurrir.
Este apagón informático global destaca la vulnerabilidad de nuestra infraestructura digital y la interdependencia de los sistemas tecnológicos en todo el mundo. A medida que avanzamos hacia una era cada vez más digitalizada, es crucial que se implementen medidas de seguridad robustas y se realicen actualizaciones de software con extrema precaución.
La rapidez con la que se detectó y corrigió la falla es un testimonio de la capacidad de respuesta de las empresas de ciberseguridad. Sin embargo, la prevención de futuros incidentes similares requerirá una colaboración estrecha entre todas las partes involucradas y una vigilancia constante de las amenazas emergentes en el panorama digital.