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Dejar de fumar es una de las mejores decisiones que puedes tomar para tu salud. Los beneficios comienzan casi de inmediato y continúan a lo largo del tiempo. Aquí te mostramos un cronograma de los cambios positivos que experimenta tu cuerpo cuando dejas de fumar.
Primeros 20 minutos
- Frecuencia cardíaca y presión arterial: Tu frecuencia cardíaca y presión arterial comienzan a normalizarse, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
8 horas
- Monóxido de carbono: Los niveles de monóxido de carbono en la sangre disminuyen a la mitad, y el oxígeno en la sangre aumenta, mejorando la oxigenación de los tejidos.
24 horas
- Riesgo de ataque cardíaco: Disminuye el riesgo de un ataque al corazón.
48 horas
- Sensación de olfato y gusto: Comienzan a mejorar a medida que las terminaciones nerviosas empiezan a regenerarse.
72 horas
- Capacidad pulmonar: Los bronquios empiezan a relajarse y la capacidad pulmonar aumenta, facilitando la respiración.
2-12 semanas
- Circulación sanguínea: La circulación mejora significativamente, lo que facilita la actividad física y reduce la fatiga.
1-9 meses
- Función pulmonar: Se experimenta una notable mejoría en la función pulmonar. La tos y la dificultad para respirar disminuyen a medida que los pulmones se limpian y recuperan su función normal.
1 año
- Riesgo de enfermedad coronaria: El riesgo de enfermedad coronaria se reduce a la mitad en comparación con un fumador.
5 años
- Riesgo de accidente cerebrovascular: El riesgo de accidente cerebrovascular puede reducirse al mismo nivel que el de una persona que nunca ha fumado.
10 años
- Cáncer de pulmón: El riesgo de morir de cáncer de pulmón se reduce a la mitad en comparación con alguien que sigue fumando. También disminuye el riesgo de otros tipos de cáncer, como el de boca, garganta, esófago, vejiga, riñón y páncreas.
15 años
- Riesgo de enfermedad cardíaca: El riesgo de enfermedad cardíaca es similar al de una persona que nunca ha fumado.
Beneficios adicionales
- Piel: La piel recupera su elasticidad y color, luciendo más saludable.
- Dientes y encías: La salud dental mejora, reduciendo el riesgo de caries y enfermedades de las encías.
- Sentido de bienestar: Mejora el sentido general de bienestar y autoestima al lograr dejar de fumar.
Consejos para dejar de fumar
- Establece una fecha: Escoge un día para dejar de fumar y manténte comprometido.
- Busca apoyo: Habla con amigos, familiares o únete a un grupo de apoyo.
- Utiliza sustitutos: Considera la terapia de reemplazo de nicotina o medicamentos que te ayuden a manejar los síntomas de abstinencia.
- Manténte activo: El ejercicio puede ayudar a reducir el deseo de fumar y mejorar tu estado de ánimo.
- Evita desencadenantes: Identifica y evita situaciones que te provoquen ganas de fumar.
- Sé paciente: Recuerda que los síntomas de abstinencia son temporales y los beneficios para tu salud son duraderos.
Dejar de fumar es un desafío, pero los beneficios para tu salud y bienestar hacen que el esfuerzo valga la pena. Con perseverancia y apoyo, puedes lograr una vida libre de humo y disfrutar de los múltiples beneficios que conlleva.
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