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China, ya consolidada como un líder mundial en la generación de energía eólica marina, ha dado un paso más en su ambiciosa agenda de energía sostenible. El país asiático ha instalado la turbina eólica más grande jamás vista, capaz de generar 18 MW, en una base marítima de prueba en la provincia de Guangdong.
Un monstruo tecnológico en el mar
La nueva turbina, desarrollada por la compañía DongFang, se destacó en el evento China Wind Power celebrado en octubre pasado. En menos de un año desde su presentación, esta colosal estructura ya está en funcionamiento, produciendo energía verde para miles de hogares chinos. Con un rotor de 260 metros de diámetro, sus aspas abarcan una superficie de 53,000 metros cuadrados, equivalente a la extensión de siete estadios de fútbol.
Impacto ambiental y capacidad energética
La turbina de 18 MW tiene el potencial de generar 72 millones de kilovatios/hora (kWh) al año, suficiente para abastecer a más de 36,000 hogares con electricidad renovable. Este gigantesco aerogenerador no solo representa un avance en capacidad energética, sino también un importante beneficio ambiental, evitando la quema de 22,000 toneladas de carbón y la emisión de 59,000 toneladas de dióxido de carbono anualmente.
Objetivos ambiciosos de sostenibilidad
China se ha fijado metas ambiciosas para el futuro, buscando que un tercio de su consumo de electricidad provenga de energías renovables para 2050 y alcanzar las cero emisiones netas para 2060. Este megaproyecto en Guangdong es solo uno de los muchos esfuerzos del país para construir un futuro energético sostenible. La inversión en parques eólicos de dimensiones colosales, comparables en tamaño a Noruega, es una parte crucial de esta estrategia.
Liderazgo en energías renovables
China ha sido un actor dominante en la industria de la energía eólica marina durante años, representando el 49% de la generación mundial, superando incluso a Europa con un 47%. Con la instalación de la turbina más grande del mundo, China no solo reafirma su liderazgo, sino que también marca el ritmo para el desarrollo de tecnologías eólicas a nivel global.
Innovación y competencia internacional
Mientras compañías occidentales como Vestas y General Electric se mantienen en el rango de los 16 MW para sus turbinas, China está impulsando los límites de la tecnología eólica. La turbina de 18 MW de DongFang sigue el camino trazado por otras innovaciones chinas, como la turbina de MingYang Smart Energy, que ha alcanzado picos de más de 20 MW en días de viento fuerte.
Avances en la descarbonización
El desarrollo de estos aerogeneradores gigantes es parte de los esfuerzos de China por descarbonizar su economía y reducir su huella de carbono. En el pasado, otras turbinas de gran capacidad, como la de 16 MW que enfrentó vientos de hasta 83 km/h, han demostrado ser capaces de producir 384 MWh de energía, suficiente para 170,000 hogares. Estos proyectos no solo muestran la capacidad tecnológica de China, sino también su compromiso con un futuro más limpio y sostenible.
China está claramente a la vanguardia en la carrera por la energía renovable, utilizando su avanzada tecnología para crear soluciones energéticas que no solo son eficientes, sino también ecológicas. Con la instalación de la turbina eólica más grande del mundo, el país asiático demuestra su capacidad y determinación para liderar la transición global hacia un futuro energético sostenible. Con proyectos como este, China no solo espera alcanzar sus objetivos de energía renovable, sino también establecer un nuevo estándar mundial en la lucha contra el cambio climático.
